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viernes, 30 de marzo de 2012

Amor platónico: Hilary Duff



Todos hemos tenido en alguna ocasión un amor platónico (o en su defecto, un mito erótico, que para el caso, casi que vale igual), o incluso varios. En mi caso, puedo decir que mi amor platónico fue Hilary Duff.
A esta mujer la descubrí en su día cuando estaba ojeando una revista en una tienda (sí, eso que hacemos todos pero nadie reconocer hacer)y vi varias fotos de ella... Al momento, surgió el amor platónico (no el caso de amor que se ve todos los días (festival de humor en el vídeo)).
Hojeaba las revistas para ver si salían hablando de Hilary Duff (incluso alguna me la llegaba a comprar, y en su día conseguí un poster de ella que aún tengo pegado en la pared de mi cuarto), alguna vez vi la serie en la que salía ella (aquella serie repelente de "Lizzy McGuire"), me compré un par de discos de ella (sí, la chavala cantaba. Otra cosa es la calidad de su música, que podemos discutir acerca de ella)...
Vamos, que la niña me tenía loco. Pero el caso es que fue creciendo, y llegó un momento en que ya no era tan niña. Ella, que nació tres años antes que yo, llegó a hacerse una mujer en toda regla (sí, pueden pensar lo que quieran con eso de "regla"). Y si no se lo creen, miren:



La primera vez que lo vi, yo me quede tal que así:



El tiempo fue pasando, y la chica parecía querer dejar un poco atrás su imagen inocente, porque acabó posando para FHM (la foto no es mía, que le quede claro al FBI, que desde lo que paso aquí en noviembre no me fío) y para Maxim.
A lo tonto, el tiempo ha pasado (y rápido) y Hilary Duff ha tenido incluso un crío hace pocos días, pero... A mí ella me sigue poniendo tontorrón, que le voy a hacer... La chica está bastante bien...

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